Modificación en vivo del genoma humano.
La verdad es que los tiempos cambian que es una barbaridad. Ahora que nos habíamos acostumbrado a que nuestro genoma era nuestra identidad, algo inmutable a lo largo de toda nuestra vida y que nos definía como individuos únicos, ahora resulta que de aquí a unos añitos lo iremos cambiando sobre la marcha, añadiendo modificaciones y diseñando un cuerpo totalmente diferente al cuál teníamos al nacer.
Parece ciencia ficción? pués claro, pero eso no quiere decir que no lo vayais a ver. Las implicaciones de este artículo son que esto es posible.
En el artículo nos cuentan que han modificado genéticamente a ún ratón y le han añadido genes que expresan un antibiótico y que se activan en unas circunstancias que les venían bién (en este caso cuando una célula es una célula madre, pero eso no importa para nuestro caso).
Lo importante es que luego, para aislar las células madre y separarlas de las otras lo que hicieron fué infectar al ratón con una bacteria, y las células que no expresaban el antibiótico murieron, quedando intactas las células madre.
Ahora bién. Imaginemos que utilizamos esa técnica de la siguiente manera. Extraemos células madre de las venas del corazón de una persona con una enfermedad, por ejemplo, arterioesclerosis. Luego las modificamos genéticamente y añadimos dos genes. Uno que expresa el antibiótico, y otro que exprese un compuesto que luche contra el colesterol. Luego reintroducimos las células en el corazón del tío, les damos tiempo para que emigren un poco y se distribuyan por el corazón y luego infectamos al tío con un resfriado cuyas bacterias sean sensibles al antibiótico.
El resultado final es que las células madre originales del corazón del tío morirán con mayor probabilidad, siendo sustituidas por las nuevas, que al proliferar harán que al cabo de un tiempo todas las células del corazón tengan el nuevo genoma, resultando en un corazón de diseño, diferente del que originalmente se tenía, con una capacidad mucho mayor en algún aspecto que nos interese, en este caso mayor resistencia a la arterioesclerosis.
Si repetimos este procedimiento con distintas partes del cuerpo terminaremos con un organismo en el que el genoma no es el mismo en todos sus órganos. Un organismo al que se le puede hacer evolucionar y convertirse en algo muy distinto sobre la marcha y para el que el genoma original no es ya su definición, sino su punto de partida.
Parece ciencia ficción? pués claro, pero eso no quiere decir que no lo vayais a ver. Las implicaciones de este artículo son que esto es posible.
En el artículo nos cuentan que han modificado genéticamente a ún ratón y le han añadido genes que expresan un antibiótico y que se activan en unas circunstancias que les venían bién (en este caso cuando una célula es una célula madre, pero eso no importa para nuestro caso).
Lo importante es que luego, para aislar las células madre y separarlas de las otras lo que hicieron fué infectar al ratón con una bacteria, y las células que no expresaban el antibiótico murieron, quedando intactas las células madre.
Ahora bién. Imaginemos que utilizamos esa técnica de la siguiente manera. Extraemos células madre de las venas del corazón de una persona con una enfermedad, por ejemplo, arterioesclerosis. Luego las modificamos genéticamente y añadimos dos genes. Uno que expresa el antibiótico, y otro que exprese un compuesto que luche contra el colesterol. Luego reintroducimos las células en el corazón del tío, les damos tiempo para que emigren un poco y se distribuyan por el corazón y luego infectamos al tío con un resfriado cuyas bacterias sean sensibles al antibiótico.
El resultado final es que las células madre originales del corazón del tío morirán con mayor probabilidad, siendo sustituidas por las nuevas, que al proliferar harán que al cabo de un tiempo todas las células del corazón tengan el nuevo genoma, resultando en un corazón de diseño, diferente del que originalmente se tenía, con una capacidad mucho mayor en algún aspecto que nos interese, en este caso mayor resistencia a la arterioesclerosis.
Si repetimos este procedimiento con distintas partes del cuerpo terminaremos con un organismo en el que el genoma no es el mismo en todos sus órganos. Un organismo al que se le puede hacer evolucionar y convertirse en algo muy distinto sobre la marcha y para el que el genoma original no es ya su definición, sino su punto de partida.
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